¿Qué es un autoclave?
El autoclave es un aparato utilizado en el ámbito sanitario, químico y alimentario para esterilizar objetos y sustancias, sometiéndolos a altas presiones a través del vapor, las elevadas temperaturas o la radiación. La esterilización elimina los microorganismos nocivos para la salud o responsables de la degradación del producto.
En el ámbito de la alimentación, el paso por el autoclave es una garantía de seguridad para el consumidor. Propicia la conservación óptima de preparados de origen vegetal y animal envasados en recipientes de vidrio y metal durante periodos muy amplios, alargando sus fechas de caducidad y consumo preferente.
¿Cómo funciona un autoclave?
El autoclave a vapor, el más común en la industria alimentaria, funciona mediante la generación en su interior de una presión muy elevada durante un tiempo corto. El objetivo es que el vapor de agua alcance la temperatura de destrucción idónea para causar la muerte de los microorganismos que se busca neutralizar. Normalmente, se precisan temperaturas superiores a 100ºC durante algo más de 15 minutos.
Una vez efectuada la esterilización, se procede a la despresurización de la cámara y a un enfriamiento rápido de los envases mediante un sistema de rociado o inmersión en agua helada.
Uso de autoclaves en el sector de las conservas de pescado y marisco
Los autoclaves forman parte del equipamiento imprescindible en la industria conservera. Para que los pescados y mariscos enlatados se mantengan en perfectas condiciones de consumo durante años, es necesario intervenir mediante dos factores: su acidificación, mediante el uso de aditivos como el escabeche, que bajan el pH del medio y previenen el desarrollo de las colonias de patógenos; y su esterilización, proceso que se lleva a cabo con todas las garantías sanitarias gracias al autoclave.
En Palacio de Oriente fuimos pioneros al montar hace un siglo, en nuestra planta de Vigo, un taller de maquinaria puntero en la industria conservera. Troqueles, sertidoras y autoclaves salieron de nuestras instalaciones para abastecer a otras empresas y para sustentar nuestra producción propia. Por motivos como este somos hoy la conservera en activo más antigua de España, maestros conserveros desde 1873.