El pescado es un alimento esencial en la dieta mediterránea y muy importante para el desarrollo y el crecimiento de los niños por sus valores nutricionales y sus beneficios para la salud. ¿Pero desde qué edad se puede comer pescado? ¿Son recomendables todas las especies? ¿Y qué sucede con las conservas?
Primeros alimentos en los niños
El embarazo siempre genera muchas dudas sobre la dieta que hay que seguir, pero después de los meses de gestación, la llegada del bebé suscita nuevos interrogantes relacionados con los alimentos que este puede o no puede comer. Una dieta sana, equilibrada y variada es importante en cualquier edad, pero en el caso de los niños es esencial para su correcto desarrollo y crecimiento y estos son los criterios que conviene observar durante su primer año:
- En los primeros meses, la alimentación del bebé debe basarse en leche materna o, en su defecto, leche de fórmula bajo recomendación médica.
- A partir de los seis meses, la OMS y Unicef recomiendan iniciar la alimentación complementaria. Además de la leche, se pueden ir introduciendo otros productos frutas, verduras, carne blanca y pescado. En este último caso, conviene empezar con pescado fresco, blanco y desmenuzado o en puré. Estos primeros pescados pueden ser la merluza o la pescadilla. De esta manera irán experimentando con distintos sabores y texturas.
- En el noveno mes, se puede añadir el pescado azul, que será un alimento esencial para su desarrollo por sus múltiples beneficios.
- A partir de los 12 meses, pueden incorporarse en la dieta conservas de pescado azul como el atún claro, el bonito del norte o las sardinas. No obstante, no conviene abusar de ellas, ya que es recomendable que consuman alimentos sin sal. Lo mejor es elegir conservas que no lleven conservantes, colorantes, aditivos, grasas nocivas o azúcares añadidos.
Por otro lado, aunque el pescado azul sea muy beneficioso, hay que tener en cuenta que no todas las especies están recomendadas para los más pequeños.
Precaución con determinados pescados para los niños
El Comité de Alimentación Infantil y Lactancia Materna, CAILM, de la Asociación Española de Pediatría, AEP, sigue las recomendaciones que en 2019 la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, AESAN, actualizó respecto al consumo de pescado y el cuidado con el contenido en metilmercurio de determinadas especies.
Según este informe, las especies con alto contenido en mercurio serían:
- Pez espada o emperador
- Atún rojo (Thunnus thynnus)
- Tiburón (cazón, marrajo, mielgas, pintarroja y tintorera)
- Lucio
De acuerdo con este listado, AESAN aconseja:
- Evitar el consumo de especies de alto riesgo en niños menores de 10 años.
- Limitar el consumo de las especies mencionadas en niños entre 10 y 14 años a menos de 120 gramos al mes.
Recomendaciones del consumo de pescado en niños
¿Cuánto pescado es aconsejable consumir a la semana?
- En el caso del pescado fresco, se recomienda el consumo cuatro veces por semana.
- En el caso de las conservas, tres veces a la semana, ya que su contenido en sal puede ser mayor.
Beneficios del pescado azul en el crecimiento
Entre sus múltiples propiedades positivas, el pescado azul destaca por las siguientes:
- Es un alimento bajo en grasas saturadas.
- Es rico en ácidos grasos Omega 3, que incentiva el desarrollo cognitivo del niño, ayuda al crecimiento, mejora las funciones cardiacas, controla la presión arterial y reduce la tasa del colesterol.
- Dentro del Omega 3, el ácido docosahexaenoico, DHA, es importante para el desarrollo del cerebro, el sistema nervioso y la visión.
- Cuenta con numerosas vitaminas. La vitamina A es buena para la vista, los dientes, la piel y las uñas y para mantener un buen sistema inmunitario. La vitamina D sirve para el desarrollo de los huesos. Además, cuenta con varias de la rama de la vitamina B como B2, B3, B6, B9 y B12.
- Aporta proteínas y varios minerales como potasio, fósforo, calcio, hierro, magnesio y yodo.
Ventajas de las conservas para la alimentación de los niños
Las latas de pescado en conserva son un alimento muy cómodo para la dieta de los más pequeños:
- Los alimentos en conserva no pierden sus propiedades.
- Las conservas no tienen espinas, lo que da seguridad.
- Las latas de pescado son muy útiles para preparar recetas divertidas y apetecibles como tortillas, pasta y ensaladas.
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Ya tienes toda la información acerca de cuándo y cómo introducir las conservas en la dieta de los niños. Te proponemos que empieces con nuestro atún claro en aceite de oliva o nuestro bonito del norte bajo en sal para que se vayan habituando a estos sabores y, poco a poco, incorpores otros alimentos. Porque en Palacio de Oriente queremos que los más pequeños crezcan fuertes y sanos.
