Primero
Salmorejo con bonito del norte en aceite de oliva y huevo
Primero
Receta de salmorejo con bonito del norte en AOVE y huevo
Una delicia de crema fría con olor a Córdoba y sabor a Galicia. Déjate sorprender por una receta tradicional a base de tomate, miga de pan y la compañía del bonito del norte. El aceite de oliva virgen extra de las conservas de Palacio de Oriente potencia el gusto y aporta untuosidad. ¡Un salmorejo con bonito del norte de diez!
Elaboración
Una hora antes de comenzar con la receta debes poner la miga del pan tipo telera cordobesa a remojo para que resulte más fácil de integrar.
Coloca una cazuela pequeña con agua al fuego y espera a que hierva. Cuando llegue a ebullición introduce los 2 huevos durante 4 minutos. Después de ese tiempo, saca los huevos y mételos en agua con hielo para cortar la cocción.
Pela los huevos y resérvalos hasta el momento del emplatado.
Elige los tomates más maduros que tengas en la despensa. Cuanto más blanditos estén, que no pochos, más sabroso y gustoso quedará el salmorejo.
Para que el pelado de los tomates resulte sencillo lo mejor es escaldarlos. Para ello coloca una cazuela con agua a hervir y deja preparado otro recipiente con agua con hielo. Mientras esperas a que rompa a hervir, ve haciendo un corte superficial a cada tomate en forma de cruz.
Una vez que el agua comienza a cocer introduce los tomates durante 20 segundos. Después de ese tiempo pásalos rápidamente al agua fría y déjalos ahí durante unos 2 minutos. Ahora que están escaldados, puedes retirar la piel sin esfuerzo.
Trocea los tomates y tritúralos con la ayuda de un robot de cocina.
Es momento de incorporar el puré de tomate a la miga de pan que se estaba humedeciendo. Deja reposar unos minutos mientras se macera.
Introduce la mezcla anterior en el robot. Añade un ajo morado, previamente remojado en agua con un chorrito de vinagre, y tritura durante 8 minutos.
Cuela el salmorejo y llévalo de nuevo al robot de cocina.
Abre las 2 latas de bonito del norte de Palacio de Oriente y añade el aceite de oliva virgen extra de cada conserva al salmorejo. Al triturar con la compañía del AOVE consigues una emulsión y untuosidad perfectas.
Prueba la crema fría y sazona a tu gusto.
Deja reposar el salmorejo en el frigorífico hasta el momento de servir.
Para terminar, coloca en el fondo de un cuenco o plato hondo una generosa cantidad de salmorejo cordobés. Añade sendos tacos de bonito del norte con AOVE de Palacio de Oriente y los trozos de huevo cocido al tamaño que más te guste. Espolvorea con perejil picado. ¡Buen provecho!